Urique. – José Noriel Portillo ‘El Chueco’, jefe de plaza en Urique y hoy objetivo de captura prioritario por asesinar a dos padres jesuitas y un apreciado guía de turistas en Cerocahui, comenzó el domingo su desmadre luego de discutir con un par de hermanos durante un partido de béisbol.
Esto de acuerdo a la versión que dio el incompetente Fiscal General de Chihuahua, Roberto Fierro Duarte, quien aclaró que se trató de un hecho previo al asesinato de los sacerdotes, que hasta condenó el mismo Papa Francisco, mandamás de la mafia del Vaticano.
Los deportistas fueron identificados como Paul B y Armando B., quienes jugaban en un equipo rival al que patrocinaba El Chueco, quien desde el domingo por la tarde se encontraba fuera de control, quien en primera instancia asesinó a Paúl con arma de fuego y en lo posterior quemó su casa
Los sicarios del Chueco tuvieron piedad de una mujer y un menor de edad quienes lograron escapar de este ataque y ya se encuentran fuera de peligro. Ambos hermanos se encuentran también en calidad de desaparecidos y se presumen muertos, o esclavizados en algún sembradío.
La Fiscalía de Chihuahua ofreció 5 millones de pesos por la captura de El Chueco, a quien se presume dejaron ir los marines el abril pasado y se le atribuye el asesinato del profesor estadounidense Patrick Braxton, del activista Cruz Soto, el desplazamiento de comunidades enteras por tala ilegal y siembra de droga, aparte del guía de turista y los miembros de la Compañía de Jesús.