Siempre existirán esos juniors que con sus alcances y ocurrencias dilapiden o dañen la carrera política que, con tanto esfuerzo, empeño, transas, desencuentros… han construido sus padres. Los ha habido en todas las épocas y los habrá siempre, en esta serie vamos a presentar algunos de ellos en orden de épocas, pero comenzaremos con un digno integrante del salón de la fama: Patricio Martínez junior.
Si bien, durante los tiempos del gobernador Patricio Martínez (sénior 1998 – 2004) los medios de comunicación estaban controlados y no había redes sociales, las peleas, zafarranchos, ridículos y excentricidades de Patricio Junior eran de dominio público.
No había reunión etílica o mesa familiar viperina y morbosona en donde no se platicara (con su respectiva admiración moral) de los circos que armaba el junior en los antros de moda, quien acompañado de su grupo élite de escoltas a cargo del erario, se sabía intocable y por ello junto con su horda de ‘Santis’ y ‘Juanjos’ Muchaplata de ese tiempo, cometía seguido una serie de atropellos, vejaciones y abusos contra todo aquel que osara cuestionar su calidad de príncipe norteño malamansado y con percha.
El “Pat Jr.” Fue toda una figura que tuvo su choque más álgido contra otro grupo de chavalos hijos de pesados del crimen organizado, que también sembraban el terror (como Drácula en tractor) en los bachilleres, además de reventar seguido las mejores fiestas. A su líder Emanuel Hernández Tarín le apodaban “El Pepino”, hijo del temido “Chacky” y años después tuvo un trágico final en el Estado de Guerrero.
En tiempos actuales de redes sociales y de dispositivos móviles con cámara, y cámaras de seguridad… El impacto de la opinión pública hacia el gobierno de Patricio Padre hubiera sido bastante fuerte, pero en esos tiempos la figura del gobernador era tan sólida y plenipotenciaria, que si sobrevivió a un balazo en la cabeza… ¿Qué le harían las lenguas viperinas que hablaban de su “Ángel?
En noviembre de 2011, como reconocimiento a sus años de sobrio y discreto comportamiento, papá le consiguió puesto al junior en el gobierno de César Duarte, y no crea usted que un trabajo cualquiera de esos que ya quisiera cualquier profesionista con postgrado, no, el puesto fue ni más ni menos que director del departamento de Industria de la Secretaría de Economía Estatal, donde duró alrededor de cinco años cobrando si de verdad trabajara.
Hoy patricio goza de popularidad amplia entre los sectores políticos y empresariales; luego de ocupar un lugar en el Sendo se le solicita como asesor. En el imaginario colectivo se encuentran los múltiples negocios inmobiliarios que hizo con información privilegiada de gobierno, que se le achacan. En el estado había orden, el clan Trevi – Andrade estaba preso en la capital y circulaba el mito de que había violencia en el matrimonio de Patricio y su esposa Patricia ¿Verdad que parece novela?
No se pierda la próxima entrega, hablaremos de Borruel Jr.